17 noviembre, 2016 Marrakech (Marruecos)
Cambio climático
El Gobierno argentino aprovechó la cumbre climática de la ciudad marroquí de Marrakech para revisar a la baja su previsión de emisiones de gases de efecto invernadero, que fueron presentados por el ministro de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman.
Esta revisión supone, en relación con las cifras declaradas por su país en 2015, una rebaja aproximada del 10% sus emisiones de dióxido de carbono en el horizonte de 2030, hasta fijarlo en 483 toneladas, y Bergman insistió en que su gobierno ha preferido fijarse una cifra absoluta y no un porcentaje, ante las discrepancias sobre las líneas de partida de cada país.
Previsiones de gases de efecto invernadero
Según dijo Bergman en una entrevista con Efe, su presentación despertó interés de las otras naciones también por la metodología empleada a la hora de fijar esa llamada “previsión de contribución nacional” que cada país debe presentar ante la COP.
Y es que la elaboración de esta contribución nacional ha tenido un enfoque “interministerial, intersectorial (se ha asociado a la sociedad civil, la universidad y la empresa privada) e interjurisdiccional”, pues los gobiernos no estatales también han contribuido a su elaboración.
En este sentido, hay 200 medidas medioambientales adicionales que han sido propuestas por los actores no estatales “y que el próximo año vamos a validar”, sostuvo Bergman.
En cuanto a los ámbitos donde se van a concentrar mayores esfuerzos para la reducción de emisiones, Bergman citó el energético y el agroalimentario, y en menor medida el industrial.
Con respecto a la energía, su gobierno presentó el pasado mayo el Plan Renovar, que prevé subir la cuota de las energías renovables de un 8% de la potencia producida a un 20%, y no pueden establecerse metas más ambiciosas en un país donde “hay cortes de electricidad en invierno y en verano”.
En el sector agrícola, su gobierno se ha propuesto como medida prioritaria una ordenación territorial que, por ejemplo, delimite el lugar y extensión de los bosques y defina una serie de parques y reservas nacionales (asociando a la empresa privada), detalles ambos prealables antes de proceder siquiera al inventario de la fauna y la flora que proteger.
Bergman tuvo palabras muy duras sobre el anterior gabinete de Cristina Kichner, y dijo que a su país le toca ahora “recuperarse, volver al mundo y ser serio, porque es mejor ser serio en el método que ser ambicioso”.
Acuerdo de París
Pero en cuestiones climáticas, dijo que Argentina ha sido uno de los países que más rápidamente se ha ido sumando a los compromisos climáticos: fue uno de los primeros en aprobar el Acuerdo de París, en ratificarlo dentro de la ONU y en ratificarlo en sede parlamentaria en Argentina.
“Y hoy somos uno de los primeros en traer a la cumbre climática índices revisados (de emisión de gases)”, dijo, antes de insistir en que su gobierno ha creado un mecanismo para que ese índice pueda ser permanentemente revisado a la baja con participación de todos los actores.
Gabinete Nacional del cambio climático
Para Bergman, no cabe la menor duda de que actualmente el medio ambiente “es una política de Estado”, y por ello el presidente Mauricio Macri creó un Gabinete Nacional del cambio climático, dependiente de la presidencia y que sirve para armonizar los intereses, no siempre coincidentes, de sectores como agricultura, energía o medio ambiente.
Para Bergman, quien por cierto ha aprovechado su estancia en Marruecos para desarrollar en paralelo una “agenda religiosa” en su condición de rabino, su ministerio “no pelea por una agenda verde, sino por una agenda ética, pues el medio ambiente y el desarrollo sustentable son derechos humanos”.